Cualquier vibrador puede usarse en pareja, pero algunos de los fabricantes más destacados de juguetería erótica han creadomodelos pensados especialmente para ser usados durante la penetración, lo que los ha convertido en los vibradores para pareja por excelencia.
Hace un tiempo ya hablamos de estos modelos, y llegamos a la conclusión, a través de la experiencia de los clientes y clientas que nos escriben y llaman, que el modelo que más gusta es el de We Vibe . De todos modos, la característica en común es que se introducen en la vagina y dejan suficiente espacio para permitir la penetración cómoda y profunda. De esta manera, aplicamos una vibración muy, pero que muy intensa en vagina, clítoris y pene, creando una sensación totalmente distinta en el coito tradicional.
Además, el sexo sigue siendo igual de intenso que sin el vibrador, ya que no le restamos importancia ni protagonismo al resto de actores: El pene y la vagina podrán seguir con su ritmo habitual, el juguete no interfiere. Aunque no lo creas, la parte que se introduce en la vagina es pequeña y plana, pero transmite las vibraciones como pocos vibradores.
Si te fijas, se trata de productos con un precio más elevado que otros vibradores, pero eso es porque esconden un diseño pensado centímetro a centímetro, que encaja con el cuerpo de la mujer y el del hombre. Además, los motores de vibración son muy silenciosos, así que olvídate del zumbido durante el sexo.
Puedes empezar las relaciones como lo hacéis habitualmente, e incorporar el juguete en cualquier momento. No es necesario que lo introduzcas en la vagina justo antes de la penetración, si lo añades un poco antes, y lleváis a cabo algunos juegos eróticos, en el momento de la penetración estarás mucho más excitada y lubricada de lo que puedes imaginar.
Aunque lubriques sin problemas, pon un poquito de lubricante en el vibrador antes de introducirlo. No se trata solo de que el vibrador penetre sin dificultad en tu cuerpo, sino de que al retirarlo no te moleste ni cause rozaduras. Recuerda que las mujeres solemos lubricar ante la excitación, pero una vez ya hemos alcanzado el orgasmo, la lubricación suele detenerse, y si hemos aplicado una gotita de lubricante, el momento de retirar el vibrador no es nada molesto.
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